Las rosas son flores de extraordinaria belleza aunque tienen un punto negativo: son bastante delicadas. No obstante, ¿sabías que existe un secreto para disfrutar de tus rosas para siempre? No es magia, simplemente tienes que optar por las rosas preservadas. Esta técnica de preservación te garantiza unas rosas eternas perfectas, siempre que les procures unos cuidados básicos para mantener su aspecto. En este artículo te contamos qué son las flores preservadas y te damos cinco consejos para cuidar una rosa eterna.

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¿Cuál es el secreto de las rosas eternas?

Antes de aprender a cuidar una rosa eterna, primero debemos saber qué son exactamente las flores preservadas y en qué consiste el proceso que permite disfrutar de unas rosas igual de bonitas durante más tiempo.

Lo que conocemos como flor preservada es en realidad una flor natural que ha sido sometida a un proceso de liofilización. Para ello, la flor se corta en su momento de mayor esplendor y se liofiliza, es decir, se deshidrata. Tras extraer el agua, la savia se sustituye por un líquido conservante ecológico que permite que el aspecto de la flor se asemeje a su estado natural, conserve su olor y presente un tacto aterciopelado. La liofilización es un tratamiento totalmente natural y no tóxico que se puede realizar en casi todas las flores y plantas.

Decoración con rosas preservadas

Por su variedad de colores y su elegancia, las rosas son una de las flores más utilizadas en decoración, especialmente en las bodas. Si se acerca el día de tu boda, vas a organizar un evento o buscas un regalo que dure para siempre, las rosas liofilizadas son una excelente opción. De esta manera, no tendrás que preocuparte de que tus ramos y arreglos florales se estropeen por el calor o el paso del tiempo. De hecho, las flores preservadas suelen utilizarse en tocados y accesorios florales porque son más resistentes y aguantan mejor que las flores naturales. 

Una vez utilizados, estos arreglos con flores preservadas pueden guardarse a modo de decoración en una caja transparente, un marco de fotos, debajo de una cúpula de cristal, etc. Sin duda, son una excelente idea para recordar ese momento especial para siempre.

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¿Qué cuidados necesita una rosa eterna?

Si bien es cierto que las flores preservadas van perdiendo color, su textura y su olor suelen mantenerse durante tres a cinco años. Existen algunos cuidados para alargar su duración y evitar que se estropeen antes de tiempo. Toma nota para conseguir la rosa eterna de tus sueños:

Evitar la luz del sol

Lo más importante para disfrutar de tus rosas preservadas durante años es mantenerlas alejadas de los rayos del sol. La luz directa podría provocar que el líquido que conservan en su interior se seque y, de esta manera, la rosa se estropearía antes de tiempo.

Evitar la humedad

La humedad tampoco es nada buena para las rosas preservadas. Estas flores podrían pudrirse en ambientes excesivamente húmedos, por lo que te recomendamos que busques un lugar seco y, ya que estás, apartado de corrientes de aire o fuentes de calor.

Limpiar el polvo

De vez en cuando, pasa un paño suave o un plumero con delicadeza por los pétalos y las hojas de tus rosas preservadas. Este cuidado no es solo por estética, ya que limpiar las flores evita que la suciedad dañe su estructura. 

No poner en agua

Puedes guardar tus rosas liofilizadas en un jarrón, ¡pero sin añadir agua! Como hemos visto, la humedad excesiva haría que tus flores se pudran. Las rosas eternas no necesitan regarse ni humedecerse para su preservación.

No aplastar las flores

La rosa eterna está pensada para ser admirada. Procura no tocarla ni aplastar los pétalos para evitar que se caigan. Al no tener savia, las rosas liofilizadas son menos elásticas y, por tanto, más quebradizas que las flores naturales.

¿Qué significado tiene regalar una rosa eterna? 

Seguro que recuerdas la famosa rosa roja bajo una cúpula de cristal de la Bella y la Bestia. En la película, esta rosa encantada era una metáfora del amor, un símbolo del romance verdadero y de la posibilidad de cambio. Al no ser una flor efímera, la rosa eterna nunca pierde sus pétalos, por eso se asocia con el amor auténtico que puede durar para siempre.

Debido a su belleza y a su simbolismo, las rosas eternas son un regalo habitual entre parejas, especialmente las de color rojo. Un ramo o una caja de rosas preservadas es un regalo original por San Valentín, ya que combina la belleza de las rosas rojas con un mensaje de amor eterno. Las rosas son flores repletas de simbolismo en función del color que elijamos y, al estar preservadas, su significado será aún más eterno.

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