El aloe vera: una planta milenaria con múltiples propiedades

¿Sabías que el aloe vera se utiliza desde hace más de 6000 años? Te contamos todas las propiedades de esta planta tan versátil para que puedas aprovechar sus múltiples beneficios para la piel, el cabello y la salud en general.

¿Qué es el aloe vera? Origen y curiosidades

El aloe vera es una planta suculenta que crece de manera silvestre en climas áridos. Se cree que procede de la península arábiga o del norte de África, aunque su origen exacto es incierto. Lo que sí se sabe, por las representaciones pictóricas de algunos monumentos funerarios, es que los egipcios ya usaban el aloe en el año 3000 a.C.

De hecho, el aloe vera se consideraba una planta sagrada en el Antiguo Egipto y era conocido como la «planta de la inmortalidad». Reinas como Nefertiti y Cleopatra lo incorporaron a sus rituales de belleza y cuidado facial. No obstante, los egipcios no fueron los únicos en aprovechar las propiedades de estas plantas. A lo largo de la historia, han sido muchas las culturas que han descubierto nuevos usos y beneficios del aloe vera. 

El secreto reside en el gel de las hojas de aloe vera, que contiene una larga lista de compuestos con propiedades cicatrizantes, antiinflamatorias, regenerativas, antimicrobianas, analgésicas, antioxidantes… Todos sus beneficios le han valido el sobrenombre de “reina de las plantas” de la medicina, ¡un apodo más que merecido!

Beneficios y usos del aloe vera

El aloe vera es un tesoro de la naturaleza que presenta innumerables beneficios y usos, desde el alivio de las molestias digestivas hasta el cuidado facial o de la piel. Sigue leyendo para descubrirlos:

Propiedades del aloe vera para la piel

El aloe vera se puede usar de manera tópica como hidratante natural para pieles secas y para reducir la irritación. Es un excelente cicatrizante para heridas, quemaduras y cortes leves. También alivia el acné y otras enfermedades de la piel como el eccema, la psoriasis y la dermatitis. En verano, es un excelente calmante después de tomar el sol.

Cuidado del cabello con aloe vera

El gel de aloe vera puro se puede aplicar directamente en el pelo para hidratar, fortalecer y estimular el crecimiento capilar, aportar brillo y suavidad al cabello, o prevenir la caspa del cuero cabelludo. Como sugerencia, puedes mezclar el aloe con otros ingredientes naturales como la miel, el aceite de coco o la avena para fabricar tus propias mascarillas caseras.

Beneficios del aloe vera para la salud digestiva

El gel transparente de aloe vera se puede licuar para preparar batidos con agua u otros ingredientes. Su consumo diario ayuda a favorecer la digestión, la pesadez y la acidez. Un uso moderado también puede reducir el estreñimiento leve. Su alto contenido en agua y polisacáridos permite eliminar toxinas y mejorar el equilibrio intestinal.

Ventajas del aloe vera para el sistema inmunológico

El aloe vera contiene acemananos, que ayudan a estimular las defensas naturales del organismo. Además, se le atribuyen propiedades antivirales, antibacterianas y antifúngicas. Es rico en antioxidantes, que combaten los radicales libres y fortalecen el sistema inmunológico, y promueve la producción de colágeno y la regeneración celular.

¿Cómo cultivar y usar el aloe vera en casa?

Aunque en el mercado encontramos un sinfín de productos con aloe vera, desde cápsulas hasta cremas para la cara, esta planta es muy fácil de cultivar si vives en un clima cálido. Con una planta de aloe en casa, podrás aprovechar los beneficios de su gel siempre que lo necesites. Para ello, solo tienes que cortar una hoja de la planta, retirar la corteza y extraer el gel. Incorporar el aloe vera a tu día a día es muy sencillo; una vez que empieces a utilizarlo, ¡no podrás vivir sin él!

Precauciones al usar aloe vera

El gel de las hojas del aloe es totalmente seguro, pero debemos tener cuidado con la aloína, una sustancia con un fuerte efecto laxante que se encuentra presente en la parte amarilla de la hoja, entre la piel y el gel. Entre otras precauciones, conviene descartar las alergias cutáneas probando una pequeña cantidad en una zona pequeña. Tampoco se recomienda un consumo prolongado sin una supervisión médica, ya que el aloe está contraindicado para algunas enfermedades.