La impaciencia es la madre de algunos problemas, pero y sobre todo, de un tremendo estado de ansiedad. Cálmense, pues, aquellos de personalidad acelerada, que no aguantan retrasos ni vacilaciones; aquellos que, cuando están enfermos, están deseando curarse rápidamente; o aquellos a quienes les resulta muy difícil tener paciencia con las personas lentas, -pues les parece un error y una pérdida de tiempo- y atizan a los que tienen alrededor.

Si la molicie no es buena, la falta de paciencia no te va a ayudar a salir del bache. He aquí, pue,s un remedio facilito para tomárselo con “take it easy”, es decir, con calma.

La impatiens, también llamada “alegría de la casa” o Balsamina es una flor muy popular,bde fácil cultivo y que, en climas cálidos, puede florecer durante todo el año.

Se utiliza tanto en exterior como en el interior de la casa. Queda perfecta en interiores bien iluminados, terrazas, patios, porches, ventanas y balcones… y como planta colgante.

Entre los brasileños esta flor se conoce como “Maria sin vergüenza”. Dice la historia que, fue la emperatriz Leopoldina quien en 1817 llevó simientes de esta planta de su jardín botánico en Austria a las fértiles tierras brasileñas. Alli esta planta floreció de una manera tan rápida y saludable que crecia en cualquier lugar y condición de ahí su nombre y sus ganas de no ocultarse.

Una tisana o mejor unas gotas de tintura de impatiens serán el remedio perfecto para el nerviosismo, la inquietud, la ansiedad y la irratibilidad.

¿A qué estás esperando????????????

 

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