Parece que las plantas no se escapan al influjo de los astros y que, como todo ser vivo, reaccionan ante sus movimientos y cambios.

Recientemente se ha comprobado que las plantas poseen una gran sensibilidad para captar y manifestar las influencias planetarias en cada momento según la configuración cósmica predominante.
Se ha comprobado que las plantas se beneficias de diferentes maneras según los días en que la luna atravesaba diferentes signos.

Así, por ejemplo, cuando la luna atraviesa un signo de agua, léase Cáncer, Escorpio o Piscis, las hojas de las plantas se desarrollan más y mejor.

Cuando la luna se acerca a un signo de fuego como Aries, Leo o Sagitario, son los frutos los que mejoran.


Si nuestro satélite entra en un signo de tierra como Tauro, Virgo o Capricornio, los bulbos y las raíces saldrán beneficiadas de su influencia.

Y, por último, cuando la luna pasa por Géminis, Libra y Acuario, es decir los signos de aire, es cuando las espigas mejoran y las flores huelen mejor.

Así que, cuando cuides tus plantas, pregunta a la luna.

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