Cerramos el año con una planta que pone aroma al invierno. Procede del mediterráneo y sus bulbos crecen en terrenos herbosos, en prados, campos y olivares, aunque también se cultiva en jardines, especialmente en España y Francia.
Su nombre, Narciso, procede del griego y alude a una leyenda clásica y trágica. Narciso, hijo de un dios y de una ninfa, era un hermoso joven que, sintiendo sed se acercó a beber a un arroyo y, viendo su rostro en el agua quedó tan fascinado por su propia belleza que fue incapaz de dejar de mirarse. Finalmente murió contemplando su reflejo y la flor que lleva su nombre creció en el mismo lugar.
Si regalas narcisos estarás enviando buena suerte, sobre todo en China, donde es considerada la flor del día de año nuevo. Hay quien dice además, que el olor embriagador de sus flores causa la locura. Si eso es lo que pretendes, busca un perfume que se llama Beyond Love Prohibited de la casa Kilian. El nombre, más allá del amor prohibido, lo dice casi todo. Esta fragancia está llena de detalles no muy evidentes al principio, pero poco a poco van apareciendo sus notas de vainilla dulce. ¡Un placer para hedonistas narcisistas!.