La planta Dracena es originaria de África, específicamente de la región subsahariana y algunas partes de Asia. Se encuentra en diversos hábitats, desde zonas costeras hasta bosques tropicales y montañas, y hay más de cien especies diferentes de Dracena. Algunas especies son arbustos o pequeños árboles, mientras que otras son plantas de interior populares debido a sus hojas largas y delgadas y su fácil cuidado.
La Dracena se ha cultivado durante mucho tiempo en muchas partes del mundo debido a su belleza y resistencia, y ha sido utilizada como planta de interior decorativa en hogares, oficinas y otros lugares comerciales. También se ha utilizado en la medicina tradicional para tratar diversos problemas de salud, como dolores de cabeza, fiebre y trastornos respiratorios.