Cuando las Navidades se acaban, llega el momento de recoger la decoración navideña. Pero, ¿y la poinsettia?, ¿Qué consejos podemos seguir para disfrutarla durante los próximos doce meses? A diferencia de lo que muchos creen, la flor de Pascua puede sobrevivir perfectamente pasada la Navidad. En este artículo hemos preparado una serie de consejos para que sepas qué cuidados específicos debes aportar a tu flor de Pascua. Aunque es habitual que sus hojas se caigan en enero, con estos trucos conseguirás llegar a la siguiente Navidad con una poinsettia fresca y repleta de hojas verdes y brácteas rojas. No te pierdas nuestras recomendaciones para presumir de flor de Pascua de año en año:

Planta de Pascua

En busca del lugar adecuado para nuestra flor de Pascua

Si queremos conservar la flor de Pascua pasada la Navidad, lo primero que debemos tener en cuenta es el lugar en el que vamos a colocarla. Lo ideal para la poinsettia es situarla en un espacio con una temperatura constante. Si quieres que tu flor de Pascua sobreviva hasta las próximas navidades, deberás mantenerla a una temperatura suave, de entre 16 y 21 grados. También es muy importante que la planta no reciba corrientes de aire intensas, ni calientes ni frías. La calefacción es tu peor enemiga para conservar la flor de Pascua, así que colócala lo más lejos posible del radiador. Con el calor seco sus hojas amarillean y se caen, por eso muchas veces no sobrevive dentro de casa durante el invierno.

La luz ideal para la poinsettia

Aunque ya esté aclimatada a tu hogar, la flor de Pascua es una planta que necesita una gran cantidad de luz. Por este motivo, siempre es más aconsejable situarla en un lugar luminoso, como junto a una ventana. El secreto para que florezca es que la poinsettia reciba mucha luz durante el periodo de floración. Eso sí, el sol directo no es nada recomendable y puede poner en riesgo a tu planta. En otoño, invierno y primavera el sol no es tan intenso, pero en verano deberás tener mucho cuidado.

La flor de Pascua en el exterior

Aunque tradicionalmente las poinsettias son de interior, en realidad estas plantas no tienen miedo al frío y pueden sobrevivir perfectamente en el exterior. Si vives en una zona cálida, puedes colocar tu poinsettia en tu patio o jardín. Para ayudarla a aclimatarse, asegúrate de que no se produzcan variaciones bruscas de temperatura y no olvides protegerla del sol intenso y directo. La flor de Pascua es una planta que aguanta bien las bajas temperaturas y sobrevivirá en zonas algo más frías siempre y cuando no haya heladas. No olvides que esta planta viene de México.

Cómo y cuándo regar la flor de Pascua

Al principio, el riego debe ser abundante pero no excesivo, porque las raíces se pueden pudrir. Cada hogar tiene sus propias características, por lo que no podemos recomendar una frecuencia concreta. En general, deberás vigilar la planta y tocar la tierra para saber si necesita agua. La poinsettia es muy sensible al exceso de humedad, así que es importante no regar si el sustrato no está seco. Durante el verano y en la época de floración, recomendamos aumentar la cantidad de agua. Como hemos comentado, la flor de Pascua sufre con la humedad excesiva, por lo que su sustrato debe ser poroso con un buen drenaje.

¡Cuidado con las brácteas!

Las brácteas son las “hojas” rojas de la flor de Pascua, ya que sus flores en realidad son pequeñas y amarillas. Si te fijas bien, las verás en su interior. A la hora de regar la flor de Pascua es muy importante no mojar las brácteas. Si quieres conservar su buen aspecto, evita rociarlas para que no aparezcan manchas o pierdan su bonito color.

flor de pascua

Otros cuidados especiales para la flor de Pascua

Aparte de prestar atención a la temperatura, la luz y la humedad, como ocurre con cualquier otra planta, la poinsettia requiere otros cuidados que podemos pasar por alto pero son igual de importantes.

Cómo podar la flor de Pascua

Durante el mes de enero, la poinsettia irá perdiendo sus hojas verdes y rojas. Cuando se hayan caído todas, podemos podar la planta para favorecer su desarrollo y garantizar su supervivencia. Para la poda, deberás cortar las ramas y los tallos a una distancia de unos 10 cm (a la altura de la tercera yema). Además, puedes sellar la zona de corte con un poco de pasta cicatrizante o cera. De esta manera, evitarás posibles plagas y enfermedades. 

Cómo trasplantar y abonar la poinsettia

Una vez pasada la floración, en febrero y marzo, aconsejamos utilizar abono o fertilizante con el agua del riego un par de veces al mes. En octubre y noviembre podemos cambiar a un abono específico para prepararla para la floración. Esta planta suele echar bastantes raíces, así que quizás necesites trasplantarla en primavera. Si decides colocarla en tu jardín, ten en cuenta que es un arbusto y podrá llegar hasta los cinco metros de altura. En el interior, te recomendamos cambiarla a una maceta más grande si fuera necesario, donde podrá alcanzar hasta los 50 cm. Por último, la clave para que florezca en diciembre es mantenerla entre 12 y 14 horas al día en completa oscuridad durante el otoño.

Poinsettia


En muchas ocasiones, la flor de Pascua es un regalo de un ser querido, por lo que es una pena no conservarla durante todo el año por no conocer los cuidados adecuados. Si sigues nuestras recomendaciones, podrás disfrutar de esta fantástica planta de origen mexicano durante todo el año, incluso podrá “florecer” de nuevo durante la siguiente Navidad con un color rojo intenso. En Interflora queremos que disfrutes siempre de tu planta, sin duda dará un toque de calidez a tu hogar.

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